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lunes, 16 de diciembre de 2013

La alimentación sana retrasa el envejecimiento

La alimentación sana retrasa el envejecimiento

Por La Stampa y Clarín

Más evidencias sobre los beneficios de alimentos como el cacao, el vino tinto, el té, el aceite de oliva y los frutos de bosque. Destacan su riqueza en antioxidantes.

03/12/13 - 16:28
Durante un simposio convocado de manera especial, dentro del marco del 24° Congreso Anual de la American Chemical Society (ACS) en Indianápolis, Estados Unidos, se confirmó cómo algunos ingredientes de una alimentación sana son la llave para atrasar el envejecimiento del organismo.
El simposio, titulado “Derivados fenólicos para los alimentos y la salud humana”, se concentró en los alimentos como el cacao, el vino tinto, el té, el aceite de oliva y otros más, recordando que todos son alimentos ricos en sustancias antioxidantes.
Los antioxidantes (los derivados fenólicos o polifenoles), sabemos, cumplen un papel fundamental en lo que tiene que ver con limitar la acción de sustancias nocivas como, por ejemplo, los radicales libres, reduciendo el riesgo de inflamación, una condición que puede preceder a varias enfermedades, entre ellas el cáncer y las dolencias cardíacas.
Los expertos reunidos en este congreso analizaron también las propiedades benéficas de especies como la cúrcuma o el jengibre, que actúan como protectores contra varias enfermedades. Y no se olvidaron de los frutos del bosque, como las moras, que son benéficos también contra los problemas del intestino y el aparato urinario.
En suma, una vez más, los expertos confirmaron que los alimentos pueden ser una especie de farmacia de la que se puede tomar lo mejor que tiene para ofrecernos.

Traducción: Silvia Simonetti
Fuente: Clarin.com, Buena Vida.
Disponible en: http://www.clarin.com/buena-vida/nutricion/alimentacion-sana-retrasa-envejecimiento_0_1040896316.html

martes, 10 de diciembre de 2013

La actividad estomacal nocturna puede ser clave para la obesidad

 LOS INVESTIGADORES OBSERVARON QUE UNAS CéLULAS ACTúAN COMO UNA ESPECIE DE RELOJ NEURAL EN EL ESTóMAGO PARA REGULAR LA CANTIDAD DE COMIDA NECESARIA Y TENER LA SENSACIóN DE PLENITUD


Las células del estómago, que operan como una especie de reloj neural para reducir el apetito durante la noche, puede ser la clave para entender la tendencia a la obesidad y diabetes de las personas que no tienen turnos regulares de trabajo, según un estudio divulgado en Australia.

Los nervios situados en las paredes musculares alrededor del estómago, cuya función principal es emitir señales para dar la sensación de plenitud, son la base del estudio de un grupo de científicos australianos de la Universidad de Adelaida.

El grupo de investigadores, liderados por Stephen Kentish, utilizaron ratones de laboratorio para estudiar las respuestas de un grupo de nervios situados en las paredes musculares alrededor del estómago durante un período de 24 horas.

Los científicos midieron la actividad de los nervios cuando las paredes del estómago estaban estiradas en intervalos de tres horas entre las 6 de la mañana a las 3 de la madrugada del día siguiente.

Así descubrieron que los nervios eran menos sensibles al estiramiento del estómago cuando los ratones estaban normalmente despiertos, mientras que éstos eran más sensibles cuando los animales estaban dormidos, lo que permitía que el cerebro recibiera la sensación de estar lleno más rápido, aplacando las ganas de comer. 


Fuente: SIDNEY/AUSTRALIA elpais@opinion.com.bo | 09/12/2013 | Ed. Imp.Disponible en: http://www.opinion.com.bo/opinion/articulos/2013/1209/noticias.php?id=114038

domingo, 1 de diciembre de 2013

Por ley, los alimentos tendrán que bajar hasta 15% el sodio

Una nueva ley busca contrarrestar el consumo excesivo de sal. Obligará a disminuir su cantidad en productos procesados y a eliminar saleros de los restaurantes. Es para reducir el impacto en la salud.
25/11/13 - Por ley, los alimentos tendrán que bajar hasta 15% el sodio

En un año, los alimentos procesados, como galletitas, chacinados, caldos y quesos por salut, contendrán hasta un 15% menos de sal. Así lo dispuso la nueva ley del Congreso que intenta contrarrestar el impacto que el consumo excesivo de sal tiene en la salud de la población argentina: produce más casos de hipertensión, el trastorno que altera los niveles de la presión arterial, y es causa de infartos, ataques cerebrovasculares, e insuficiencia renal. Por año, mueren 50.000 personas como consecuencia de la hipertensión no controlada.
La norma contra el consumo excesivo de sal fue impulsada por el diputado José Daniel Guccione (Frente para la Victoria-Misiones), y necesitará de la adhesión de las legislaturas provinciales y de la ciudad de Buenos Aires para que se implemente en su totalidad.
Además de las obligaciones para las empresas de alimentos, la ley también exige que los restoranes eliminen el salero de las mesas. Un antecedente de esa medida fue un programa que puso en marcha el Ministerio de Salud bonaerense en mayo de 2011, que obligó a retirar el salero de las mesas.
El consumo excesivo de sal es una preocupación para las autoridades sanitarias desde hace 5 años. En 2009, un trabajo del Ministerio de Salud de la Nación había revelado que los argentinos consumían más del doble de sal que la medida máxima recomendada por la Organización Mundial de la Salud: en promedio se consumían 13 gramos de sal por día en ese momento. Lo ideal es consumir menos de 5 gramos de sal por día. Luego de ese estudio, la cartera de salud armó el programa “Menos sal, más vida” por el cual se hicieron acuerdos con los panaderos artesanales que aceptaron bajar el contenido de sal en el pan en un 25% y con 34 empresas (como La Serenísima, Arcor, Nestlé, Molinos y Sancor, entre otras) que aceptaron también rebajar las cantidades.
Esas reducciones ya permitieron un cambio para la salud de todos: se consiguió bajar el consumo de sal de 13 a 11,2 gramos por día este año. “El éxito de una estrategia sanitaria se mide por el resultado que alcanza, y que hayamos evitado dos mil muertes al reducir el consumo de sal en un plazo tan breve nos indica que estamos transitando el camino correcto”, comentó el titular de la cartera de Salud, Juan Manzur.
Ahora, con la sanción de la ley se buscó un alcance mayor, ya que se obliga a todas las empresas a bajar el contenido de sal según valores máximos estipulados que llegan hasta el 15% durante 2014.
Al año siguiente, el Ministerio de Salud establecerá nuevos valores. Además, la norma estableció que deben incorporarse advertencias en los envases sobre los riesgos del consumo en exceso y fijó que el tamaño máximo de los sobrecitos de sal será de 500 miligramos (hasta ahora llegaban a los 2.000). Los restoranes deberán ofrecen opciones de menúes sin sal y con sal reducida en sodio. Si las empresas y los restoranes no cumplen, pueden recibir multas que rondan entre los mil y un millón de pesos.
Tanto las asociaciones médicas como las empresas valoraron la ley.
Como presidente de la Sociedad Argentina de Hipertensión, Felipe Inserra, destacó que las empresas hagan reducciones en la sal. “Es un aspecto central porque la gente consume grandes cantidades de sal en los alimentos sin saberlo y sin poder controlarlo”.
En tanto, Pedro López Matheu, director de asuntos corporativos de Mondelez International (antes Kraft Foods) que vende productos clásicos como las galletitas Exprés, dijo a Clarín que “la industria colaboró activamente con la sanción de la ley”. Prevé que la reducción de sal no será fácil para los procesos de producción: “La sal cumple algunas funciones que todavía no pueden ser sustituidas por ningún otro ingrediente: les da el sabor típico a algunos alimentos, y además contribuye a su conservación, al leudado de las masas y a la textura y rendimiento”.

Fuente: http://www.clarin.com/salud/ley-alimentos-bajar-sodio_0_1036096412.html